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Resulta llamativo ver a un club como el Real Madrid con unos ingresos tan elevados y un resultado positivo de 40millones de euros aproximadamente toma decisiones tan extravagantes y polémicas para sus socios y aficionados. Véanse la inclusión de un dragón en la camiseta negra de la temporada 2014/2015, los distintos colores por los que han pasado la segunda y tercera equipación en los últimos años (verde, rojo, azul, naranja o rosa) y sobre todo la venta de jugadores referencia de primer nivel como Di Maria u Özil pese al descontento de la afición.

¿Qué lleva al R. Madrid a adoptar estas controvertidas estrategias y decisiones tanto deportivas como de marketing? ¿La avaricia y búsqueda de mayores beneficios? ¿La necesidad?

Aunque resulte impactante viendo su cuenta de resultados, un club de entidad mundial con ingresos tan elevados y crecientes como el Real Madrid C.F. atraviesa serios apuros económico-financieros. Así, de un sencillo estudio de la composición del balance y la cuenta de resultados del Real Madrid C.F. se desprende que dicha entidad se encuentra ante un grave problema de liquidez.

El activo del club destaca por estar compuesto principalmente por inversiones no corrientes (>70%) destacando las partidas de inmovilizado intangible deportivo correspondiente a los derechos de transferencia de jugadores y el inmovilizado material. Estos activos destacan por su dificultad para hacerse líquidos, no solo por su naturaleza sino por las consecuencias negativas que podría tener su enajenación, puesto que los ingresos y estabilidad del club dependen en gran medida de mantener dichos recursos ya que la venta de importantes jugadores o del estadio podría mermar seriamente su capacidad de generar ingresos. En cuanto al patrimonio neto y el pasivo destaca que la financiación externa supera el 60% y que más de la mitad de esta es a corto plazo. Todo ello resulta en una cifra de pasivo corriente mucho mayor que la de activo corriente, lo que da lugar a un fondo de maniobra negativo de 90 millones de euros. Esto supone un serio problema de liquidez puesto que gran parte de su activo no corriente se financia con deuda a corto plazo y no podrá pagarla en el periodo comprometido. También es llamativo que las periodificaciones de pasivo son mucho mayores que las de activo, lo que implica que el R. Madrid está cobrando servicios por adelantado y esas entradas de dinero no se percibirán en los próximos ejercicios pudiéndose agravar aún más el citado problema de liquidez.

En cuanto a la cuenta de pérdidas y ganancias destaca que el resultado de explotación es positivo, alcanzando los 57,6 millones hecho positivo para el Real Madrid, pero analizando en mayor profundidad se observa que casi 52 de esos millones provienen de la enajenación de inmovilizado. Esto implica que el R. Madrid ha tenido que desinvertir (vender importantes jugadores de las plantillas tanto de fútbol como de baloncesto) para conseguir un resultado de explotación elevado en la deportivamente exitosa temporada 2013/2014. A esto cabe añadir que los gastos financieros derivados de la elevada deuda contraída por el club ascienden a casi 12 millones de euros, suponiendo una reducción aproximada del 20% del resultado de explotación ‘inflado por la venta de importantes jugadores’. Así las cosas, el resultado final es de 38,5 millones de euros y de no haberse vendido ningún jugador sería negativo. Además, la naturaleza dependiente del azar (victorias en competiciones deportivas) y del marketing provoca una volatilidad muy elevada de la cifra de ingresos por competiciones deportivas y dificulta la desinversión necesaria para hacer frente a la deuda a corto plazo.

En conclusión se puede afirmar que la situación económica del Real Madrid C. F. es negativa y previsiblemente empeorará en próximos ejercicios puesto que se han adelantado ingresos de años anteriores, de forma que los graves problemas de liquidez hacen necesario tomar decisiones de desinversión (venta de jugadores) y campañas de marketing arriesgadas que pueden poner en riesgo las fuentes de ingresos del mismo.

Pero todos estos serios problemas se deben analizar no solo desde la perspectiva contable de la empresa sino desde su posición en el mercado. Así, el R. Madrid es una institución con mucho poder de mercado capaz de renegociar su deuda para solventar los serios problemas de liquidez. Pero esto solo atrasa el problema en el tiempo, la solución es conseguir nuevas fuentes de ingresos publicitarios como la incorporación de otro patrocinador en la equipación o en la fachada del estadio, al igual que han hecho otros clubes europeos. De no conseguirse ese aumento de los ingresos otra solución podría ser la venta de jugadores que no es recomendable en cuanto que puede implicar descensos en sus ingresos por marketing y resultados deportivos o la venta del estadio Santiago Bernabéu que, además gracias a su revalorización conforme a la ley 16/2012 resultaría más apropiada fiscalmente ya que disminuiría el beneficio por su enajenación y con ello la tributación por impuesto de sociedades.

¿Cuál será el siguiente paso? Solo la directiva lo sabe, pero los rumores de la inclusión de publicidad en el nombre del estadio Santiago Bernabeu toman cada vez más fuerza, entre otras cosas porque lo dejo entrever el propio presidente del club en la última junta de socios. Un acuerdo de tal entidad permitiría al club superar las adversidades financieras, llevar a cabo la ansiada reforma del estadio y mantener el proyecto deportivo del club. De hecho, ya comienzan a sonar posibles interesados y condiciones del patrocinio como es el caso de ABU DHABI que parecería estar interesado en poner su nombre en la fachada del Bernabéu durante 20 años por cerca de 400 millones de euros. Esto implicaría un incremento de 20 millones de euros en los ingresos anuales y una entrada de liquidez que permitiera solventar todas las dificultades.

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